El Grupo Prisa ha presentado un balance financiero optimista para el primer trimestre de 2025, destacando a su división educativa, Santillana, como la fuerza motriz detrás de los buenos resultados. Con ingresos de 113 millones de euros y un EBITDA ajustado de 32 millones, Santillana se confirma como el principal contribuyente a la rentabilidad del grupo, respaldada por una estrategia clara de digitalización y expansión internacional.
La transformación del modelo educativo hacia esquemas digitales de suscripción ha sido clave. A cierre de marzo, el 76 % de los ingresos de Santillana provinieron de suscripciones digitales, lo que refleja una evolución acelerada frente a modelos tradicionales de venta de libros y materiales escolares impresos. Esta modalidad permite a la compañía generar ingresos recurrentes y sostenibles, con un enfoque centrado en el aprendizaje continuo y adaptativo, muy valorado en el contexto educativo actual.
La expansión de este modelo ha tenido una fuerte acogida en mercados clave de América Latina. En países como Brasil, México, Colombia y Perú, Santillana ha logrado posicionar sus plataformas educativas como soluciones integrales para instituciones públicas y privadas, mejorando tanto el acceso a contenidos pedagógicos como la interacción entre docentes, alumnos y familias. Este enfoque ha permitido mitigar la estacionalidad típica del negocio editorial, tradicionalmente ligado a campañas escolares puntuales.
El impacto positivo de la transformación digital de Santillana no solo se refleja en sus cifras. También es evidente en la percepción del sector educativo, que valora el aporte de soluciones tecnológicas que integran inteligencia artificial, analítica de datos y adaptabilidad curricular. Estas herramientas facilitan una experiencia personalizada de aprendizaje, algo que las autoridades educativas y los docentes consideran clave en un entorno marcado por la diversidad de contextos y necesidades.
La compañía ha reforzado su inversión en innovación, ampliando su catálogo de contenidos interactivos y consolidando alianzas estratégicas con gobiernos, organismos multilaterales y actores del ecosistema educativo. Según fuentes del grupo, esta visión de largo plazo es la que ha permitido a Santillana convertirse en el pilar sobre el que se asienta la recuperación financiera de Prisa.
En paralelo, la mejora de los indicadores financieros de Santillana ha contribuido a reducir el nivel de deuda global del grupo. El EBITDA conjunto de Prisa en el trimestre fue de 46 millones de euros, con una deuda financiera neta que se redujo hasta los 587 millones, el nivel más bajo en dos décadas. Este logro financiero se ve en parte impulsado por la capacidad de Santillana de generar caja de manera sostenida, algo que ha sido reconocido por analistas e inversores.
Manuel Mirat, consejero delegado de Prisa, ha subrayado que “el área de Educación no solo mantiene su peso dentro del grupo, sino que lidera el proceso de transformación digital con impacto real en millones de estudiantes y docentes”. Asimismo, destacó que las suscripciones permiten un modelo de negocio más predecible, resistente a ciclos económicos adversos y adaptable a los cambios en el entorno educativo.
A futuro, la compañía prevé seguir consolidando su presencia en América Latina, ampliando el alcance de sus productos digitales y mejorando la personalización del aprendizaje mediante tecnologías emergentes. También se contempla el fortalecimiento de su oferta para el segmento de educación pública, con soluciones inclusivas que atiendan a comunidades vulnerables.
El desempeño de Santillana pone en relieve una tendencia global: la educación digital como motor de transformación y sostenibilidad en los grupos editoriales tradicionales. Mientras otras compañías luchan por adaptarse a la transición digital, Prisa ha encontrado en su unidad educativa un ejemplo exitoso de innovación aplicada y rentable.
La visión de convertir la educación en un eje estratégico de crecimiento ha sido, sin duda, una de las decisiones más acertadas del grupo en los últimos años. En un momento donde la demanda de soluciones digitales en educación continúa creciendo, Santillana se perfila como una plataforma líder en la región, con un enfoque centrado en la calidad pedagógica, la accesibilidad y la tecnología al servicio del aprendizaje.
La evolución de los próximos trimestres dependerá de la capacidad de Prisa para seguir adaptándose al entorno y de mantener su ritmo de innovación en el campo educativo. Por ahora, los resultados del primer trimestre de 2025 confirman que la apuesta por la educación digital no solo es viable, sino rentable y estratégica.
Fuente: El País
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