Antes, el personaje de Papá Noel era representado de muchas formas diferentes en distintos países y culturas. En Estados Unidos no había una imagen estándar de cómo se veía Santa Claus. Algunos lo pintaban alto y delgado, otros bajo y rechoncho. A veces llevaba sombrero, otras gorro frigio. Y su vestimenta podía ser de cualquier color.
Fue en 1931 cuando Coca-Cola y su ilustrador Haddon Sundblom crearon una campaña publicitaria navideña para revitalizar las ventas de invierno de la bebida. En los anuncios se mostraba a un sonriente anciano de barba blanca, con un traje y gorro de color rojo brillante. La campaña tuvo tanto éxito, que para mediados del siglo XX esa era la imagen estándar y universal de Papá Noel en Estados Unidos y luego se expandió al resto del mundo.
¿Por qué Coca-Cola eligió el color rojo? Hay varias teorías. Una es que buscaban resaltar los colores distintivos de su logotipo blanco y rojo. Otra es que el rojo se asocia a la felicidad, calidez y generosidad, valores que encaja perfectamente con la imagen de Santa.
Sea cual sea la razón, lo cierto es que desde entonces Papá Noel dejó atrás sus antiguos trajes y adoptó para siempre el llamativo color rojo, icónico en la actualidad.
Así pues, fue gracias a una estrategia publicitaria que buscaba vender más gaseosas, que el personaje navideño por excelencia cambió radicalmente su imagen después de siglos.
Fuente: Asicks Marketing, Coca Cola
Escribe tu comentario