DBS Group, el banco más grande del sudeste asiático, ha dado un paso decisivo en su transformación digital: su estrategia de inteligencia artificial ya está generando un impacto económico considerable. Según su CEO, Tan Su Shan, la adopción de IA podría superar los 1.000 millones de dólares singapurenses (S$) en valor económico este año.
Este resultado es fruto de una implementación ambiciosa: DBS ha desarrollado más de 370 casos de uso de IA, respaldados por más de 1.500 modelos. Esa escala operativa permite al banco aplicar inteligencia artificial en diversos frentes, desde la optimización interna hasta la entrega de servicios personalizados a clientes.
El uso de IA en DBS está generando valor de tres formas claves: ahorro de costos, aumento de productividad y generación de ingresos. Parte del impacto viene de la automatización de procesos repetitivos, lo que reduce el tiempo operativo y libera al personal para actividades más estratégicas. Además, la IA contribuye a la personalización de servicios para clientes institucionales y minoristas, lo que mejora la relación con los clientes y eleva su fidelidad.
Un ejemplo concreto es el uso de más de 100 algoritmos de IA dentro de su app digital para generar recomendaciones personalizadas y “nudges” financieros: alertas sobre ahorro, productos o decisiones de inversión basadas en el comportamiento del cliente.
Para alcanzar estos niveles, DBS no ha confiado únicamente en tecnología: ha invertido fuertemente en desarrollar capacidades internas. En su reporte anual, el banco señala que su estrategia digital e IA está respaldada por una infraestructura de datos robusta y un programa de capacitación para empleados.
En paralelo, DBS ha implementado un modelo de gobernanza de IA basado en el marco PURE (Propósito, Transparencia, Respeto y Explicabilidad), para asegurar que sus proyectos de IA se desarrollen de manera responsable. Esta gobernanza es clave para equilibrar innovación con riesgos reputacionales y regulatorios, especialmente en un sector tan sensible como el bancario.
La estrategia de DBS ya ha sido reconocida globalmente. Harvard Business School ha desarrollado un caso de estudio sobre su adopción de IA, destacando cómo la institución industrializó la analítica y aplicó modelos avanzados. Además, en el ámbito financiero la entidad ha sido destacada como uno de los bancos con mayor liderazgo en IA gracias a su ejecución, profundidad tecnológica y transformación organizacional.
A pesar de los éxitos, la transformación con IA no está exenta de riesgos. La presión regulatoria en torno al uso de modelos avanzados, especialmente los generativos o “agentic”, exige un balance delicado entre innovación y control. En eventos recientes, representantes de DBS han alertado sobre la necesidad de “guard rails” claros para evitar errores o sesgos en la toma de decisiones automatizada.
Otro riesgo relevante es la gestión de talento. La IA potencia la productividad, pero también redefine funciones laborales. DBS anticipa cambios en su fuerza laboral, por lo que ha lanzado una estrategia de reskilling para preparar a sus empleados en áreas de valor agregado.
La experiencia de DBS puede servir como un modelo para otras entidades financieras que buscan transformar su operación con IA. Su enfoque demuestra que no basta con invertir en tecnología: se requiere un diseño estratégico escalable, cultura organizacional adaptativa y una gobernanza sólida.
Para otras instituciones, especialmente en mercados emergentes, el caso de DBS subraya tres lecciones clave: primero, que la IA puede generar un retorno medible y no es solo una promesa futura; segundo, que escalar con éxito exige combinación de talento humano y modelos técnicos; y tercero, que la ética y la regulación deben acompañar cada paso para generar valor sostenible.
DBS ya no ve la IA como una apuesta, sino como un motor consolidado de crecimiento. El banco proyecta que este año su estrategia generará más de S$ 1.000 millones en valor económico, una cifra que refleja un cambio profundo en la forma en que la banca puede operar en la era digital.
La visión de largo plazo de DBS —donde la IA no solo automatiza procesos, sino que mejora la experiencia del cliente, empodera al talento interno y refuerza sus capacidades competitivas— marca un precedente para el sector. En un momento en que muchas compañías evalúan sus inversiones tecnológicas, DBS demuestra que una estrategia centrada, bien ejecutada y ética puede transformar significativamente una institución financiera.
Fuente: CNBC
Escribe tu comentario